miércoles, 11 de febrero de 2009

Mi calle tiene un oscuro bar, húmedas paredes...

..."Doy mi dirección, a quien brindo mi amistad, mas al saberla, no me quieren, visitar".

Así, con estos fragmentos de aquella pedazo canción de Lone Star, hago mención a una triste noticia para la ciudad de Zaraguaya: Belloch, él solito, se enfunda en la más impropia manera de "hacer democracia" e impone el nombre de San José María Escriva de Ballaguer a la actual General Sueiro. Y lo hace con el apoyo, como no de el Partido Popular: "*...está elevado a los altares y es indudable que ha llevado el nombre de Aragón por todo el mundo".

Pero, como bien recuerdan desde IU: "un personaje que alabó los principios fundamentales del franquismo con demostrada vehemencia."*

Hay varias cosicas que no logro entender: Por un lado, que, en un Estado supuestamente laico, se otorgue una calle al fundador del Opus Dei. Por otro, y quizás más importante, que se realice sin buscar el consenso con el resto de partidos cuando, aunque totalmente imperfecta e inmadura (por parte de la sociedad), vivimos en democracia. Asimismo, que se ensalce la figura del fundador de una secta; sí, permitida y dentro del estamento eclesiástico, pero secta. Y, finalmente, que, recordemos, la Iglesia y, dentro de ésta, el Opus Dei, apoyó el régimen franquista y, supuestamente, se suprime el nombre de esa calle por su vinculación a un militar que se sublevó junto con Franco.

Realmente, no entiendo nada... ¡Que alguien me lo explique!

* Extraídas de: "Belloch ordena rebautizar General Sueiro como Escrivá de Balaguer"

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