En un mes, he recibido dos mensajes que me han despertado en mitad de la noche. Ambos venían desde Barcelona y, además, proponen una quedada. Asimismo, los dos tienen en común que un chico (por el artículo determinado que aparece), se da a conocer por medio de "soy el de..." y no a través un nombre.
Sin duda, el primer mensaje que recibí daba más pistas, pero no lo conservo puesto que perdí el celular. Por lo que allí pude leer, parecía una especie de cita para algún tipo de servicio nocturno (pueden imaginarse cual), algo que se repite en el segundo mensaje, aunque no tan claramente.
Mis únicas teorías factibles son: que hay un teléfono de citas que debe de ser muy similar al mío y que, al marcarlo, se equivocan en un número y... ¡zas! mensajito al canto. Lo mismo, pero con algún/a camel. O si no, que por alguna extraña razón, en ocasiones se da un cruce de líneas entre determinado número y el mío y... ¡zas! mensajito al canto.
Me hace gracia, pero es una gran chingada que te despierten, cuando duermes plácidamente, para nada...
Sin duda, el primer mensaje que recibí daba más pistas, pero no lo conservo puesto que perdí el celular. Por lo que allí pude leer, parecía una especie de cita para algún tipo de servicio nocturno (pueden imaginarse cual), algo que se repite en el segundo mensaje, aunque no tan claramente.
Mis únicas teorías factibles son: que hay un teléfono de citas que debe de ser muy similar al mío y que, al marcarlo, se equivocan en un número y... ¡zas! mensajito al canto. Lo mismo, pero con algún/a camel. O si no, que por alguna extraña razón, en ocasiones se da un cruce de líneas entre determinado número y el mío y... ¡zas! mensajito al canto.
Me hace gracia, pero es una gran chingada que te despierten, cuando duermes plácidamente, para nada...
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