lunes, 20 de agosto de 2007

Cita

La sociedad se basa en la agresión, en el afán de adquirir, en el sentido de predominio del uno sobre el otro, etc., -el sistema cultural. Hemos aceptado esa moralidad, vivimos de acuerdo con ese patrón moral, lo aceptamos como cosa inevitable, y así se ha convertido en hábito. Cambiar este hábito […] sólo es posible cuando comprendemos la naturaleza del miedo.

Uno tiene entonces que comprender la naturaleza del pensamiento […] No sé lo que va a pasar mañana. Podría perder el empleo, no sé, cualquier cosa puede pasar. Así que tengo miedo del mañana. Es el pensamiento lo que ha producido el miedo. Dice “podría perder mi puesto, mi esposa podría abandonarme, puede que esté solo, tal vez tenga aquel dolor que tuve ayer, etc.”. El pensamiento, el pensar sobre el mañana y tener la incertidumbre del futuro crea temor […]

Se tiene miedo a la muerte, ese miedo a la muerte es el hábito, la cultura en que nos hemos criado.

Este mundo está tiranizado por el miedo, y este es uno de los más monstruosos problemas que tiene cada uno de nosotros […] Cuando uno vive en el temor, vive en tinieblas. ¡Es una cosa terrible! Lo percibe uno, pero no sabe que hacer con él; con el miedo a la vida, el miedo a la muerte, el miedo a los sueños.

KRISHNAMURTI, La libertad interior


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenas!
He leido la cita, me ha impresionado porque soy de esas personas que viven con miedo al mañana, a qué pasará. Realmente, sí, nos hemos acostumbrado a unas normas sociales en las que sólo importa el que está por encima, yo estoy por debajo y me resisto a que eso ocurra en mi vida. Y, volviendo al miedo al mañana, el jueves por la noche se me cruzo el destino en mi vida que me puso una sonrisa en la cara todo el viernes, así que...quiero más mañanas como el viernes.bs

closada dijo...

Hola!

El miedo al mañana es una chingalada, porque es tener miedo a algo que no existe, a algo que tan sólo está creado por nuestra mente, claramente influenciada por una cultura que nos "impone" planear ese futuro. Así que mala vaina ¿no?

Las normas sociales están para darles la vuelta; c'est à dire, hacer sentir a la gente que los que "están por debajo" son tan importantes o más que los que "están por encima".

Y el destino, ay el destino... el mío lo manejan mis diosecillos y, la verdad, son bastante puñeteros y juguetones; eso, para bien y para mal, le da más salsa a la vida...

Besos

cuco dijo...

El miedo al mañana fue, es y será un mal de la condición humana pero nos hace estar despiertos o sea se vivos, el problema reside cuando creemos o mas bien nos inculca la sociedad la necesidad de creer en algo superior que nos “ayuda”, no es la solución, nos hace sentir que disminuye el miedo pero crea una dependencia sin sentido que nos ata y nos vuelve más cobardes o sea mas miedosos, por eso yo pienso que hemos de respetar al mañana pero creer en nosotros mismos que somos realmente quienes solucionaremos los problemas, crecerá nuestra confianza y creceremos como personas, si desde tiempos inmemorables hubiésemos pensado sin temor , si no nos hubiese influido Platón, si el catolicismo o cualquier otro tipo de religión no nos cegará sin razón, donde estaría la humanidad……….

closada dijo...

Guzmán , muchas gracias por el texto. Es francamente interesante. Ahora, en esta majadería de Blog, toca una serie de citas de Krishnamurti del mismo libro, así que te invito a que la visites cuando quieras. De todas maneras, supongo que ya lo habrás leído, pero, bueno, siempre es bueno recordar, reflexionar, debatir, tan sabias palabras.

Bueno, Cuquito , en parte tienes razón. Podemos respetar el mañana, como tú dices; mas, considero que si hacemos eso hemos ser conscientes de que ese mañana es una ilusión. Sí, de ilusiones se vive, pero hay que tener claro que no son más que eso: ilusiones, sueños, esperanzas. C’est à dire, el mañana no como fin, sino como camino. ¿Qué quiero decir? Pues que lo que se vive es el presente, no el mañana, pues ese futuro inexistente lo más seguro es que no llegue. Y, ¡ay, carajo! Si no llega… frustración, decepción, desánimo. Mala vaina es, quillo; estamos chingados.

Además, ese mañana que vamos a vivir (si es que llegamos), está totalmente condicionado por la cultura, sociedad, política en que vivimos. Así, estamos doblemente condicionados en nuestra vida: por un lado, nuestro deseo de lo que “poseeremos” en ese futuro; por otro, lo que la sociedad quiere que deseemos. Así pues ¿cómo vamos a avanzar y hacer que crezca nuestra confianza si estamos tan condicionados? Creo que nos hace estar más vivos, más despiertos, el disfrutar al máximo el tiempo en el que estamos viviendo, obviamente siendo conscientes de que puede existir un futuro en el que querremos poder disfrutar al máximo. Por eso, y dentro de las posibilidades de cada persona (o incluso fuera de ellas en ocasiones), no hay nada como vivir el presente.

En cuanto a la “ayuda” de algo superior, estoy totalmente de acuerdo. Si existe algo superior que nos “ayuda”, éste está totalmente por encima de nosotros. Nuestra vida dependerá de él, así que nuestros problemas, como tú señalas, quedarán a su antojo. Nosotros no podremos hacer nada por solucionarlos, más que orar, que nos escuche y los solucione, o no. Glup, eso me da un mal rollo del carajo, de veras. Paso, paso…

Salutaciones futuras (porque lo leerás luego, o no… jejejeje)