lunes, 22 de enero de 2007

Estercuel: La encamisada. Y Pitarque, por supuesto

Llega aquí una nueva entrega de este disparatado Blog para toda la Galaxia. En esta ocasión, una narración llena de cultura, puesto que voy a intentar describir, entre los sucesos paranormales que nos sucedieron, una tradición de un pueblo turolense llamado Estercuel.

En un principio, yo había solicitado la descripción del viaje para hacerme un “planning” y, así, poder hacerme una idea de las cosas, con su horario aproximado, de lo que íbamos a hacer. Obviamente, mi hoja con el plan “detallado” no se aproximaría mucho a la futura realidad.

La salida estaba programada de madrugada. A mí, me recogían a las 6 de la mañana en la Plaza San Miguel. Mala vaina fue lo de salir de currelar del Calaveras y Diablillos a las 5.10 de la mañana. Vamos, me dio tiempo de llegar a casa, ducharme, ponerme ropita limpia y tomar un yogurt desnatado de camino al coche de “Cuco” (José Oscar de toda la vida, pero al final me lo han pegado las muy petardas). Allí estaban él y Virginia. La puntualidad, extrema. Casualmente, suena La culebra; no se pede pedir más. Falta nuestra cuarta pasajera, Olga, a quien recogemos también a la hora establecida.

No sé a que cabeza se le había ocurrido lo de parar a almorzar de camino. Pero si está todo cerrado a esas horas, carajo. De tirón, como no, llegamos a nuestro destino: Estercuel. Son las 8 de la mañana. No hay ni dios en las calles. ¡Ah! Suena “bakala” de una peña y vemos chispas de una hoguera que todavía está viva. Como hemos venido a bailar, pues, como no, yo bailo cual maquinero amante de Pastis y Buenri, al tiempo que como unas deliciosas mandarinas.

Las hogueras: La noche del Sábado-Domingo se queman hogueras en lo que se denomina La encamisada…


Tenemos también nuestra percepción especial del asunto. Como si fuera San Juan, decidimos quemar tres cosas malas, a ver si se van de una puñetera vez ¿no? Además, hemos de saltar la hoguerita (en este caso, brasillas humeantes, jejejeje). En la primera que vemos, de camino al hotel para desayunar, realizamos ya nuestro primer propósito del día: papelitos, saltos, fotos… Llegamos al hotel y decidimos quitarle una estrella porque está cerrado. Carajo, son las 8 pasadas y cerrado, no es normal. En la puerta, tres jóvenes con los ojos inyectados en sangre dan muestras de ir muy serenos, jejejeje. Y, de repente, dos tipos empiezan a saltar y a sacar maletines por la ventana del bar del hotel. Es su única forma de salir de allá, donde están atrapados. Son de la televisión, conjetura Virginia, quien acierta en su suposición.



Como no abren, decidimos bajar al Bar la Campana, para ver si está abierto. De camino, salto mi segunda hoguera, y lo hago con un estilazo que rompe moldes…


Cerradísimo de la muerte. Y mis compis de viaje se van a mear, dejándome solo en un pueblo desconocido para mí, mientras veo que baja un coche a 10 km/h. Tengo miedo, me hago caquitas, jajajaja.



Regresamos al hotel. El día de la marmota ha comenzado. Otra vez la misma hoguera, las mismas calles, la vueltecilla por el pueblo... Pasamos por la casa de Jesús, comentario que casualmente suena al ladito de la iglesia. Descubrimos que estos estercuelisquis (habitantes de Estercuel según el diccionario de Pibe), han decidido cambiar el nombre al pueblo. Utilizan una extraña numeración en sus portales, creo que para que pase a denominarse Jestercuel. Pero, esto sólo es una teoría. Callejeamos y, por segunda vez, llegamos al hotel. ¡Por fin! Está abierto. ¡Yiiihaaaa! Cafecito calentito, croissant, muñecas curiosas a la venta… Revivimos un poquito.


Llegamos a la plaza de la iglesia. Allí es donde tiene que comenzar todo. Están los de la tele-salta ventanas, y empiezan a llegar los primeros habitantes del lugar. En primer lugar, “La Llega”. Unos, entre ellos Jesús, tocan cancioncillas (mi incultura no me permite saber cuales son ni porqué son esas las que se tocan), otros van vestidos con capas (tipo Los Brincos), y sombreros, mientras otros (de dos en dos), llevan unas cestas grandotas entre las manos. Para mí, todo esto es realmente curioso; me siento como el aventurero de los Fraguel.



Empieza ya todo. Primero, con perro incluido, los músicos, los señores con capa y los quillos que portan las cestas, dan tres vueltas a San Antón. Seguidamente, se dedican a recorrer el pueblo. En algunas puertas, los/as estercuelisquis sacan una mesita con café, pacharán, vino dulce, pastas, magdalenas, galletitas, etc., para que puedan ser degustadas por aquellos que llevan a cabo la acción, así como por sus acompañantes (nosotros en este caso). Por tercera vez llegamos al hotel: día de la marmota, día de la marmota…

Tres momentos memorables en el callejear de música y baile. El primero, cuando, por fin, mojamos.



Como no, había que hacerse una foto. El segundo, el baile dedicado por Virginia y Olga a una jotera de 86 años (no cuelgo foto por las piernas ortopédicas con que sale Olga en su estupendo danzar, pero luego veréis un homenaje). Ah, no, que la foto de las piernas es otra. Pues la cuelgo, la cuelgo.



Bueno, yo después también hice mis pinitos...



Finalmente, al llegar a una mesa donde un amable señor había sacado longaniza, chorizo y panceta, entre otras cosas (llevaba yo un antojo de longaniza del carajo, os lo aseguro), lo que me pareció estupendo.


Llegamos a la plaza de la iglesia. Va a tener lugar la misa. Empieza a llegar gente y, entre ella, mujeres con mantilla y pañuelo en la cabeza. Nosotros decidimos volver a nuestro querido hotel. Cuarta visita, lo nuestro es delito. Eso sí, olivitas, pepinillos y cebolletas acompañan, en esta ocasión, nuestros refrescos.


Llegamos a la plaza justo cuando salen de misa. Empieza la procesión, con la cruz y San Sebastián a la cabeza. Una vez que termina, hay que acudir a otra plaza, donde se hace la entrega de mayorales. Aquí, se hace entrega de la capa y sombrero a aquellos que recorrerán las calles al año siguiente, así como la entrega de pañuelo a las mujeres del año venidero. Supongo que tienen otra misión, pero yo sólo he visto esto e ignoro cual es su acometer el día anterior al de nuestra visita.



En este acto, se da lo que yo creía que era "el reinau” donde unos/as voluntarios/as bailan una jota: Virginia y Olga salen a bailar. Además, se quema la aliaga más grande o más bonita, no lo sé, mientras danzan. Seguidamente, se da el intercambio de ropa anteriormente comentado. Ya veis, mis explicaciones son de aventurero loco de los Fraguel: descubriendo tradiciones para toda la Galaxia.




De todas maneras, acabo de buscar una explicación buena, extraída para vosotros/as en Internet:

La encamisada:
Todos los años, el fin de semana más próximo al día 19 de enero se celebra la fiesta de los Sanantones en la que destaca la procesión de “La Encamisada”. Los actos a celebrar en la fiesta propiamente dicha tienen este orden: la Salve en el portal de los Santos Mártires, el encendido de las hogueras, la procesión y cabalgata de la Encamisada por todo el pueblo y la cena popular alrededor de las hogueras. Se solía bailar esta noche la jota popular de “El Reinau”. Al día siguiente se realiza la “Llega”, una colecta para sufragar gastos de la fiesta, la “Misa Mayor” donde se hace la saca de “hacha” cuando los mayorales portan hachones de vela vestidos con blancos roquetes y el popular reparto de “pan bendito” por parte de las mujeres de los fiesteros ataviadas con bellos trajes de fiesta tradicionales; y para terminar el “refresco” y el “Baile de las Coronas”, un acto representativo del cambio de poderes donde los cargos salientes ofrecen sus sombreros a los entrantes en una danza. Los gaiteros que van interpretando las músicas tradicionales de cada ceremonia completan esta muestra de la idiosincrasia de las gentes de Estercuel que vale la pena conocer y disfrutar.


Nada más terminar, hemos de irnos pitando a Villarluengo, pues tenemos allá reservada la comida a las 14.30. Vamos, que nos vamos… Llegamos sólo diez minutitos tarde a la “Fonda de las quillas”, así que todo está correcto. Tenemos poco tiempo en este pueblo, así que vamos al mirador para que “Cuco” le eche la mano al… cuello a Virginia y, después, nos hacemos una foto “con Belén” ya que, finalmente, está ausente en este viaje. Tenías que haber venido, quilla… Al menos, para que veas, te hicimos un homenaje. Bueno, a ti y a las piernas bailongas de Olga, jajajaja.



Pitarque. Es demasiado tarde. Sólo podremos ir hasta la ermita, puesto que no queremos que se nos haga de noche en el camino de vuelta y el nacimiento del río queda más alejado.

De todas maneras, una vez en nuestro destino, bajamos al río para disfrutar de su sonido, de su transparente discurrir, e incluso hay quien se deleitó con su frescura ¡esa Vir! Por cierto, aunque lo niegue mil veces, a Virginia le gustó Pitarque.


Ya es de noche. Visitamos a la familia de Cuco y decidimos regresar. Anda lo que da de sí el asiento trasero de un coche. Una vez que tu compañera de viaje se quita la parte de arriba, los pantalones, y ya no haces caso a los comentarios de los de delante… Y como yo me había quedado sin masaje profesional (era mi último punto del plan), decidí hacérselo yo a ella, aunque la postura no era muy adecuada. Ya, ya, ya, los/as mal pensados/as, estaréis cavilando que sé yo. Sinvergüenzas, maleantes, especuladores de mente retorcida ¡Qué vergüenza, que vergüenza!

Saludos y espero que os animéis a disfrutar de esta festividad el año que viene.

12 comentarios:

bloc- era dijo...

¡bueno que crónica! ahora ya no hace falta que os pregunte por como os lo habéis pasado...
A VER SI CUELGAS MI HOMENAJE!!!

closada dijo...

Pero quilla, si ya está colgado. Es la foto correspondiente a Villarluengo donde salimos con las "patitas" dobladas en una pose muy sexi, jejejeje. Detrás nuestro está el belén. Ya sé que es rebuscado, pero la intención es buena: los cuatro y belén. Ya ves, nos acordamos de vos. Besitos.

bloc- era dijo...

yo también me acorde de vosotras/os mucho... a ver si por fin me puedo clonaro teletrasportar para poder estar en varios sitios a la vez.........

la tendera dijo...

vaya cuatro, de todos modos yo creo que a vir no le gustó pitarque, en todo caso el agua, los arbolicos...por cierto los de jestercuel no eran jestercuis?en fin que viva el jamon de teruel no?a!el monte ese era una mina y la han repoblao...

closada dijo...

Bueno, señorita tendera, ya empezamos con las matizaciones: que si el río, los arbolicos... eso forma parte de Pitarque así que, en su conjunto, a Vir le gustó el pueblo tan querido por el señor Cuco.
No, no, eran jestercuisquis, que lo sé yo, jajajaja.
Hostias, es verdad, jajajaja. Joder, estamos hechos polvo, toda la noche sin parar, casi no hemos dormido... ¿Pero, esos montes eran minas y han sido repobladas? ¡No me jodas, no me jodas! Juseppe Oscar, te mereces el premio a la pregunta más oportuna.

closada dijo...

Señorita bloc-era, lo de la clonación es fácil, y si no pregúntele a nuestra queridísima Dolly.
En cuanto a la teletrasportación... mejor espere a que la mejoren, no vaya a ocurrirle lo mismo que al prota de La mosca

Javier López Clemente dijo...

Closasa etnográfico con fotos y todo: Un lujo muy cerquita de mi pueblo.

Salu2 Córneos.

closada dijo...

Intentaré que haya más, ahora que la mayoría de los Domingos poseo libertad laboral.
El Pibe aventurero seguirá con sus desventuras...

CUCO dijo...

QUE A VIR NO LE PAREZCA BONITO PITARQUE, NO QUIERE DECIR QUE SEA FEO, SINO QUE SUS BONITOS OJOS NO SABEN LO QUE ES BONITO.

bloc- era dijo...

si es que Cuco nos ha salido poeta.........
Un besote

la tendera dijo...

va a ser eso, que sus poeticos ojos ven belleza allá donde...hay una mina o cómo era?insisto en que yo creo que a vir no le gustó pitarque

closada dijo...

Que si que le gustó, que sí, jajajaja.
BIP, BIP, BIP
Soy minero...