martes, 13 de mayo de 2008

Buika en la tele... al menos algo que me alegra

Hoy tenía ganas de actualizar, de contar cosicas que pasan... Pero, ahora estoy apagado. Una vez más, me tocó hacer de "pringao". Me lo comí todo con patatas, ñam, ñam. Y lo peor es que, encima, me tocan los cojones. ¡Ya está bien! Pero, hoy me oyeron. Esta vez, ofrecí la mano y, como no servía, di el brazo, la espalda, la pierna, los pies... Era la única manera de no ser yo el perjudicado. Irresponsabilidad, incompetencia, vagancia: esa era la dosis que me tenían preparada. Pero, lo que no me esperaba es que, para terminar de chingarla, me tocasen los güitos. Pasividad y, luego, impertinencia. Y, para colmo, te piden que no te enfades. Pero, hoy me oyeron, claro que me oyeron.

Lo malo: Me queda la sensación de que las cosas no cambian y que yo, una vez más, me siento defraudado por la gente.

Lo bueno: que no me rindo y sigo luchando.

Bisous

4 comentarios:

Teresa dijo...

me encanta buika, tuva la suerte de verla en la sala clamores, en madrid, y fue una auténtica gozada...

ánimo quillo, no dejes que te intoxiquen...

un beso

closada dijo...

Hola teresa,

Tranquila, quilla, que pa' la intoxicación aún queda (anda que no hay que comer)... jejeje

Besicos

Anónimo dijo...

dice una sabia amiga mía (muy viajada y experimentada) que cuando el carro de la confianza se vuelca, la carga es tan delicada y fina que es imposible volver a levantarla. Esto es lo que pasa también cuando la gente te defrauda, que uno pierde la confianza. No sé lo que te ha pasado en concreto pero, lamentablemente, a estas cosas nos tenemos que enfrentar muchas veces. La naturaleza animal del hombre se muestra en actitudes como el egoismo, propia de la supervivencia, así que... ñam ñam, a tragar y un buen vaso con bicarbonato para digerir deprisa... bssss

Javier López Clemente dijo...

Arriba compadre!!

Concha Buika vuelve de la mano de Javier Limón, y vuelve de nuevo acercándose a la copla un poquito.

El años pasado la vi en un festival de los balnearios, o algo así, la noche refrescaba y su voz, su voz todo lo derretía.

Salu2 córneos.