24 de Agosto:
Es el día del canotaje, una especie de rafting muy, muy, suave, aunque pasando por algunos rápidos molones. Es decir, no es un rafting al uso, concebido como “deporte extremo”; sino, más bien, un descenso por un río con cierta corriente y algunos rápidos, dentro de un paisaje precioso en el que, además, hay un par de sitios donde se puede parar a dar un bañito.
Canotaje Trilly Rafting
Canotaje Trilly Rafting
Descenso de 1 hora aproximada = 30000 COL
Desde Armenia, el tiquete hasta Barragán (bus hacia Caicedonia), cuesta 3500 COL. Cuando llegas, la empresa Trilly Rafting se encuentra en un chamizo de madera y bambúes que parece que se va a caer a cachos. Todo es muy cutrecico; pero, la gente es muy, pero que muy, amable.
Desde Armenia, el tiquete hasta Barragán (bus hacia Caicedonia), cuesta 3500 COL. Cuando llegas, la empresa Trilly Rafting se encuentra en un chamizo de madera y bambúes que parece que se va a caer a cachos. Todo es muy cutrecico; pero, la gente es muy, pero que muy, amable.
Una instantánea del descenso
Si quieres tener fotografías del descenso, la cámara se la puedes dar a un “pelao” que, a medida que vas descendiendo el río, se va colocando en sitios estratégicos para ir tomando foticos. Y quien lleva la barca es un chaval jovencico muy atento y se nota que se ha criado en la zona, pues se sabe el río de “pe a pa”
Barragán – Armenia – Salento
De nuevo, el precio del tiquete de Armenia a Salento nos sale por 3500 COL. Llegamos allá justito a la hora del almuerzo, así que vamos al restaurante de un guía que conocimos en RECUCA: Restaurante El del Afán. Tenemos bastante hambre, como no, y elegimos, para la ocasión, trucha al ajillo y carne asada. La presentación es muy buena, pues la comida está encima de hojas de congo, sobre la que se sitúa el arroz, la ensaladita, el patacón gigante y, finalmente, la trucha o la carne. Para los precios de acá, no es excesivamente caro, ni mucho menos.
Salento es un pueblo turístico y eso se nota en sus calles, sobre todo, en La Calle Real, con sus casitas bien restauradas de vivos colores y en las que hay infinidad de tiendas de artesanía, cafés y restaurantes.
Los Willys que se dirigen al Valle de Cocora salen cada dos horas: 08:00 – 10:00 – 12:00 – 14:00 y 16:00 horas, y el regreso del último es a las 17:00 horas (18:00 si es fin de semana y/o festivo). El tiquete cuesta 3000 COL.
Montados en el willys
En este medio de transporte sube toda la gente que puede. En nuestro trayecto, íbamos 12 personas (tres de ellas en la parrilla que sobresale del coche), lo cual es bastante divertido. En unos 25 minutos estás en Cocora y, sólo por el trayecto en Willys hasta allá, ya merece la pena subir.
Vista del Valle de Cocora
Cocora es un lugar impresionante. Mires donde mires te maravilla, con esas palmas de cera tan esbeltas y alargadas, con la bruma al fondo y las imponentes montañas… Sin duda, es uno de los parajes más bonitos que vimos.
Las famosas palmas de cera, árbol nacional de Colombia, en el Valle de Cocora
Por cierto, desde nuestra llegada a Armenia, ya habíamos convertido en tradición ver por la noche Yo me llamo y, seguidamente, El secretario.
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